El ermitaño abandonó la vida citadina para vivir alejado del bullicio y el estrés.
Rusia.- Un ermitaño ruso de nombre Yuri habita en una peculiar cueva que el mismo acondiciono, en ella hay desde paneles solares para captar energía y así poder tener acceso a electricidad, tiene una computadora las paredes de su hogar están echas con materiales como el arcilla, paja y madera capas impermeables lo protegen de la humedad provocada por las toneladas de nieve que lo rodean pero no esta solo tiene por compañía a un conejo de nombre petruska.
El hombre que se encuentra alejando de la vida citadina a unos 97 km de Moscú , decidió hace cinco años dejar su profesión de abogado y comenzar este valiente estilo de vida.
«Nací, viví, estudié, viví un poco más y trabajé y después me fastidie de todo» dice Yuri con firmeza.
Yuri cuenta con una particular biblioteca ya que los libros que posee están registrados en la biblioteca de Mundial de Bookcrossing, la gente puede ir llevar sus libros intercambiarlos o bien solo leer algunos de los que tiene ahí.
Sin embargo la principal razón de Yuri para adorar su estilo de vida él lo describe como «Cuando tienes una vida de ciudad ordinaria trabajas y constantemente piensas en el mañana. No puedes darte el lujo de cometer errores porque sería irreparable y aquí nada de eso tiene sentido.»
