En una sesión del Consejo del Trabajo; conformado por empresarios, sindicatos y representantes del Gobierno; se acordó un aumento en el salario mínimo para enero del 2017

El día de ayer, 19 de mayo, el Consejo del Trabajo aprobó un aumento en el salario mínimo del 33% para principios del siguiente año.

El Consejo del Trabajo, en Argentina, es un órgano donde participan distintos empresarios (grandes, medianos y chicos) junto con los líderes de los distintos sindicatos y representantes del Gobierno. En él se acuerdan y se resuelven temas relacionados al trabajo, con el fin de que los 3 principales actores (patrones, trabajadores y gobierno) tengan voz y puedan dialogar en condiciones de igualdad.

En la sesión del día de ayer participó el presidente argentino, Mauricio Macri, y podemos decir que los resultados fueron bastante positivos; al menos en comparación con el caso mexicano. El tema que se discutió fue el de aumentar el salario mínimo, el cual actualmente está fijado en 6,060 pesos argentinos mensuales (alrededor de 7,800 pesos mexicanos).

Después de que muchos de los integrantes del Consejo expusieran su punto de vista y se analizaran los pros y contras, se concluyó que el salario mínimo debía de aumentar en un 33%; pero que este aumento se realizaría de forma gradual.

El primer cambio que se va a dar será en el mes de junio, ya que aumentará de 6,060 a 6,860 pesos argentinos (de 7,800 a 8,700 pesos mexicanos). El segundo aumento se realizará en el mes de septiembre, el cual aumentará a 7,560 pesos argentinos (aproximadamente 9,700 pesos mexicanos), así se mantendrá hasta el final de año. Por último, en enero del siguiente año sucederá el último aumento al salario mínimo; el cual alcanzará la cifra de 8,060 pesos argentinos (cerca de 10,300 pesos mexicanos).

Este logro político mejorará la vida de las clases con los peores ingresos en el país sudamericano, con lo cual muchas personas tendrán un nivel adquisitivo mucho más digno. Como mexicanos esto lo podemos percibir de una forma mucho más clara, ya que en nuestro país el último aumento al salario mínimo fue tan sólo del 4.2% y actualmente es de 2,191 pesos mexicanos al mes (1,677 pesos argentinos). Hagamos la comparación más evidente (en pesos mexicanos); el salario mínimo mexicano (2,191 pesos mexicanos) es, en la actualidad, 3.5 veces menor que el salario mínimo argentino (7,800 pesos mexicanos). En enero de 2017, cuando el incremento haya concluido en Argentina, nuestro salario mínimo será 4.7 veces menor que el argentino (el cual estará en 10,300 pesos mexicanos). Por cada peso que gane un trabajador mexicano que perciba el salario mínimo, su símil argentino ganará 4.7. Una desigualdad completamente radical si tomamos en cuenta que estamos hablando de 2 economías con un tamaño parecido.

Aún así, al momento de votar, las 2 salas de la Central de Trabajadores Argentino (CTA); una de las 2 centrales obreras del país; votaron en contra. Dichos líderes buscaban que el aumento llegara a los 9,000 pesos argentino (alrededor de 11,700 pesos mexicanos). Por otra parte, el seguro de desempleo que estaba fijado en 394 pesos argentinos (515 pesos mexicanos) mensuales aumentó a 2,909 pesos argentinos (3,800 pesos mexicanos). Aunque los líderes de la CTA se hayan mostrado inconformes y su expectativa no se cumplió, me parece que los resultados del día de ayer muestran una victoria para la clase trabajadora argentina.

Queda como una lección para muchos países del mundo, México incluido, el cómo elaborar políticas laborales. Este acontecimiento nos muestra la importancia de integrar de mejor manera a todos los actores que participan alrededor de un tema para poder dar la mejor solución posible.

También queda en evidencia la importancia de que los líderes sindicales realmente busquen la mejora en la calidad de vida de las personas a quienes representan; y no sólo entren a sus cargos por el compadrazgo, como se acostumbra en el sindicalismo mexicano.

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