Jagger Miranda/@jaggermty
Un golpe sólido en el senado Filipino se hace oficial, esto al decretarse que el ex-boxeador profesional Manny Pacquiao ganó su lugar en la política de su país por un amplio margen y estar al cargo los proximos 6 años, en el que dejo entrever en sus primeras palabras que existe la posibilidad de verlo una vez más arriba de un cuadrilátero.
El deportista, de 37 años, recibió más de 16 millones de votos y terminó séptimo entre los 12 nuevos senadores salidos de los recientes comicios. El Senado es a menudo un trampolín para buscar la presidencia y a principios de año Pacquiao dijo que colgaría los guantes para convertirse en político a tíoiempo completo, con miras a una posible postulación presidencial.
Pacquiao representa los grandes sueños del pueblo filipino, por su gran labor como embajador con los guantes en la órbe mundial, no así, para un sector de los votantes que a menudo desaprueba su trabajo en la política por desatender sus obligaciones legislativas para enfocarse en el boxeo. Por ello, dijo que no sabía si ir o no a los Juegos Olímpicos, pues tiene miedo de que lo critiquen por ausentarse del Senado.
«Tengo que preguntarle al pueblo filipino si me permite participar en las olimpiadas», manifestó.
Mientras el Pac-Man decide su futuro inmediato entre la política y una posible participación en los próximos Juegos Olímpicos de Rio 2016 , el boxeador ya se enfundo en una victoria importante en el ámbito social,esperando que los tiempos se den para conseguir una medalla de oro para su país, si el 1 de Junio la Asociación Internacional de Boxeo Aficionado (AIBA) aprueba la regla que permite a los profesionales asistir a Río.
