Durante el año 2017 las empresas estatales más importantes de México sufrieron una fuerte pérdida económica teniendo CFE  un déficit de 9,923 millones de pesos y Pemex de 333,359 millones de pesos por diversos factores, entre los que destacan la inflación y la fluctuación de precios en el mercado internacional de los combustibles.

Comisión Federal de Electricidad (CFE) refirió que a pesar de que el 2017 fue un buen año para la empresa ya que presentó un aumentó de un 32% en sus ingresos, principalmente debido a venta de energía eléctrica, de combustibles a terceros y de transporte de energía, registró una pérdida neta de 9,923 millones de pesos durante 2017. Este resultado representa una mejora significativa respecto a los 84,824 millones de pesos negativos reportados en 2016, sin embargo dista mucho de que sea bueno debido a que CFE aún presenta pérdidas muy fuertes.

En 2017 los ingresos de la CFE fueron de 466,141 millones de pesos. Esto significa que hubo un incremento de 114,036 millones de pesos con respecto al periodo de 2016, sin embargo este notable incremento no evita que la estatal esté en números rojos al comienzo del 2018.

El aumento en las ganancias de CFE se debe a que generó mayores ingresos por la venta de energía eléctrica, de combustibles a terceros y de transporte de energía, además del reconocimiento parcial del subsidio a las tarifas eléctricas para usuarios finales otorgado por el Gobierno Federal, a partir de la Reforma Energética. Ahora la CFE en su carácter de empresa de energía, debido a la reforma energética participa activamente en el mercado de la comercialización de combustibles, explicó la estatal.

Por otra parte el aumento en los precios de los combustibles utilizados para generar energía eléctrica en los mercados internacionales afectó considerablemente los ingresos de CFE. Cabe destacar que la relativa estabilidad cambiaria benefició a la estatal haciendo que el costo financiero disminuyera de 2016 al 2017.

En tanto Petróleos Mexicanos (Pemex) tuvo una pérdida neta de  333,359 millones de pesos durante el 2017, que superó en 74% a la del 2016. Lo anterior, a pesar de que sus ingresos totales presentaron un incremento de 30% en comparación con el año anterior para ubicarse en 1 billón 404,877 millones de pesos.

Los mayores ingresos de la paraestatal fueron principalmente por un incremento en promedio de 10 dólares en el precio del barril de petróleo, en comparación con el año anterior. Sin embargo, ello derivó en un mayor pago de impuestos en el año pasando del 26% en 2016 al 47% en el 2017.

Aunque en el 2017 hubo un incremento en los pasivos totales de PEMEX de 2%, sigue estando casi un 15% debajo de los pasivos que tuvo la empresa en año 2014, por lo que al cierre del ejercicio del año pasado la estatal cuenta con 3 billones 626,131 millones de pesos en pasivos, de los cuales casi una tercera parte corresponde a pasivo laboral.

Con respecto al año pasado el pasivo de PEMEX al cierre del 2017 fue negativo por 1 billón 553,642 millones de pesos, empeorando en 26% en relación con el año anterior.

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