La noche de ayer, la poesía oscura de Mago de Oz deleitó a más de 9,000 seguidores en la Arena Monterrey. Su gira Diabulus in Opera tocó tierras regias reventando el recinto con sonidos góticos acompañados por la Orquesta Sinfónica de México, dirigida por el español José Luis López Antón.

A las nueve de la noche con quince minutos, las luces de la Arena Monterrey se apagaron para que los armónicos sonidos de la flauta y un violín calmaran el ansia del público congregado esa noche, eran los acordes iniciales de Dies irae, la canción con la que Mago de Oz cosechó los primeros alaridos de su concierto Diabulus in Opera en tierras regiomontanas.

Diabulus in Opera es el título del DVD grabado en vivo hace casi un año, el 6 de mayo del 2017, en la Arena Ciudad de México. Una obra que conserva el estilo de la banda española (de influencias folk, góticas, heavy metal y sonidos celtas) y se enriquece con la participación de la Orquesta Sinfónica de México, a cargo de José Luis López Antón, la misma que pudimos disfrutar en el concierto de anoche.

Diabulus in música, Alma, Sueños dormidos y Siempre introdujeron al público en la atmosfera que Mago de Oz pretende en su gira. A pesar de que los fanáticos ya conocían el material del DVD y el orden de las canciones, estos se entregaron en cada una de las interpretaciones.

Mago de Oz esta noche soy vosotros (…) Darnos vuestro corazón, entregarnos vuestra alma”, solicitó Zeta, vocalista de la banda.

El imponente escenario, decorado con alegorías satánicas y fantásticas, se iluminaba y arrojaba los sonidos inconfundibles de la banda, el violín de Carlos Prieto “Mohamed” y la flauta de Josema Pizarro guiaron a la sinfónica invitada y al público al particular universo musical que ha llevado a Mago de Oz al éxito internacional, una mezcla de sonidos que no se “amarra” a un género sino que se adapta con la intención de comunicar mejor sus liricas.

Gaia, Ilussia y La rosa de los vientos fueron el vehículo para que la voz de Javier Domínguez «Zeta» y Patricia Tapia tocaran las fibras de los congregantes. Txus di Fellatio, fundador de Mago de Oz en 1988, golpeaba con furia la batería ante un público que, a esas alturas, ya estaba sujeto del cuello gracias a las artes oscuras de los españoles.

 

“Esta noche sois sátiros, sois súcubos, sois íncubos, sois todo”, ordenó Zeta anunciando la recta final del recital.

Hechizos, pócimas y brujería, seguida de La cantata del diablo (extensa, emotiva y perfectamente ejecutada), fueron las últimas canciones antes del trepidante encore. Revolución, en voz de Patricia Tapia, dio paso al clímax de la tocada, el cierre con La Costa del Silencio y Fiesta pagana, la canción más representativa de Mago de Oz.

Así concluyó una velada de cantos oscuros, reclamos al establishment y rock sacrílego que muchos esperaban hambrientos. Cada uno de los asistentes salió pleno de la Arena Monterrey.

La gira Diabulus in Opera continuará con su recorrido gitano rumbo a la CDMX y Guadalajara. Después de concluir su gira por México visitarán Costa Rica y parte de Sudamérica.

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí